A principio de año nos llevamos la decepción de no haber obtenido plaza en el UTMB. Siendo positivo y haciendo caso al dicho “Donde una puerta se cierra, otra se abre”, ví la oportunidad de quitarnos la espinita que teníamos clavada desde 2009 de nuestra experiencia en Carros de Foc y donde la suerte no nos acompañó. Se lo comenté a Jesús y no me dijo que no. Pasaron las semanas y aquella idea parecía tomar forma, incluso nos atrevimos a comentarla con el resto del grupo y así, Edu y Juanjo, también descolgados del UTMB, se animaron a la aventura.
Quedaban meses, pero había que preparar la estrategia y discutirla. Quizás sea necesario una breve introducción sobre esta prueba y así se entenderá mejor lo de la importancia de contar con un buen plan.
Carros de Foc es una travesía de montaña que transcurre por el Parc Nacional d’Aigüestortes i Estany de Sant Maurici. Un recorrido circular une los nueve refugios del parque que se encuentran entre 1.900 y 2.400 m de altitud. Tú decides desde qué refugio inicias la travesía, que debe ser el mismo de tu llegada y también optas por hacer el recorrido en sentido horario o antihorario. Gran parte de la travesía discurre por el GR-11 y en cuanto a las distancias y desniveles tampoco es algo fijo y depende de variantes de la ruta y puertos de montaña que atravieses. El más corto son 55 km con unos 5.000 m de desnivel positivo, pero también hay recorridos de hasta 70 km con algo menos de desnivel. El recorrido clásico, también llamado CdF Open, se puede hacer durante todo el verano en varias jornadas, según el ritmo de cada uno y pernoctando en los refugios a tu conveniencia. La distancia más larga entre dos refugios puede ser de unos 12-13 km y la más corta de unos 5 km.
El último fin de semana de Agosto se celebra el CdF Skyrunner, el mismo recorrido con el mismo planteamiento pero que se debe finalizar en menos de 24 h. Hay una ventana de tiempo, entre las 7 horas del viernes hasta las 19 horas del sábado, en la que se puede iniciar la travesía. En el refugio que hayas seleccionado para salir, te ponen el primer sello y la hora de salida que marcará tu límite de 24 horas. Los récords de la prueba son 9h 27 min de Txus Romon en 2009 y 12h 18 min de Marta Riba en esta misma edición.
El equipo Atotrapo CdF se completa con Jaume, de la Vila, que sabe de nuestras intenciones por nuestro blog y al que conocimos en persona en entrenamientos conjuntos por Xátiva, Guadalest y Cabecó. Jorge, nuestro compañero de fatigas en el el Aneto 2010, se anima y se apunta en el último momento.
Con lo aprendido en nuestro CdF2009 y otros trails realizados posteriormente, después de ver recorridos y desniveles, leer crónicas de otros corredores, etc., ya teníamos material para decidir la estrategia de la carrera. Ésta también estaba ajustada a nuestras posibilidades y se traducía en terminar en 22-24 h. Con un margen tan ajustado se hacía más importante la selección de las mejores opciones.
La nuestra era salir temprano, el sábado al amanecer, para avanzar rápidos y frescos, y así afrontar las etapas más largas y complicadas con luz natural. Para ello era necesario haber descansado bien la noche anterior ya que por problemas de horario nos desplazábamos el mismo viernes. Mallafré sería nuestro refugio de salida, al que podíamos acceder en taxi desde Espot, donde teníamos alojamiento. Optaríamos por hacer el recorrido en sentido horario y así nos dejaríamos las etapas más cortas para el final. También decidimos que haríamos un recorrido largo, de unos 72 km y que evitaríamos la variante de Coll de Monestero, más corta pero con mayor dificultad técnica.
Otro elemento importante era el “qué me llevo“: ropa de abrigo, comida, bebida, bastones, … y muchas más cosas que puedes necesitar en una travesía de tantas horas y una climatología variable, que puede ir de los 30ºC durante el día, a los 0ºC por la noche, incluyendo chubascos, granizo e incluso nieve.
Con todo ello tomamos la salida a la 6:15 am y nos encaminamos hacia J.MªBlanc. El camino es cómodo, atravesamos algunos antiguos túneles horadados en la roca y despertamos a algún murciélago con nuestros frontales. Nos amanece en la primera de las subidas y nos descubre un paisaje maravilloso que nos deja boquiabiertos, más aún cuando llegamos al Estany Negre de Peguera donde está enclavado el refugio. Esta etapa la hemos hecho rápida, por debajo del tiempo previsto. Llevamos un tabla con los tiempos de paso que deberíamos hacer en cada etapa para cubrir nuestro objetivo, 23h y 22 min. Son tiempos que hemos obtenido de blogs de otros corredores y amigos. Este bonus que obtenemos al principio nos resultará importantísimo.
No debemos detenernos mucho en cada refugio pues tenemos que pasar por ocho y la diferencia de unos minutos puede ser decisiva en el cómputo final. Con esto en la cabeza, salimos buscando la senda que nos llevará hasta Colomina, quizás uno de los tramos más bonitos, plagado de lagos y estanques. Tenemos que subir a la Collada de Saburó, 2.667 m. También llevamos impreso el perfil de cada etapa. Mejor saber con lo que te vas a encontrar y administrar fuerzas, así como alimentarte e hidratarte en los momentos adecuados. Impresionante también el lugar donde está el refugio, al borde del lago del mismo nombre. Sellamos a las 10:41. Vamos dentro del tiempo.
La etapa hasta Estany Llong es de las más duras y largas. Terreno muy técnico, y justo a mitad, la Collada de Dellui, de pendientes muy pronunciadas a ambos lados. Subiendo nos cruzamos con el grupo de Alcoy: Jordi, Javi, Kiko … Entre abrazos nos deseamos mucha suerte para el resto del camino. El descenso desde Dellui es largo y complicado, lleno de bloques de piedra. Una hilera de estacas marca una senda inexistente. Pasado el Estany de Dellui vemos ya el valle profundo donde suponemos que está el refugio de Estany Llong. Nos cruzamos con muchos corredores y nos preguntamos si seremos los únicos que lo hacemos en este sentido. Al refugio llegamos a las 13:38 h. Es momento de reponer fuerzas pues la etapa siguiente es la más dura del recorrido. Sacamos los bocadillos que después de tanto gel y gominola saben a gloria. Pedimos unas cocacolas y nos quedamos doblados cuando nos piden 3 € por bote.
La etapa Estany Llong-Ventosa es la más temida por los corredores. Jesús y yo la teníamos grabada a sangre y fuego. Nombrar el Coll de Contraix a alguien que haya hecho CdF es suficiente para que empiece a sudar. Abandonamos el refugio y enseguida nos encontramos con el “nidito” donde pernoctaron Antonio y Juanmi hace un par de semanas y hacemos el montaje “el pesebre de Atotrapo” para la posteridad (ver foto). Todavía entre risas iniciamos el ascenso. Cae un sol de justicia y tardamos más de dos horas en recorrer 4 km y 700 de desnivel positivo. Lo que nos espera en el descenso es un pedregal de rocas de granito donde los bastones son una molestia y es conveniente tener las manos libres por si acaso. Se hace tan pesado como la subida. Después de haber hecho esta etapa en los dos sentidos no soy capaz de decir cual es la mejor forma de afrontarla. A Ventosa llegamos muy cansados y deshidratados porque nos habíamos bebido todo lo que llevábamos encima. No quiero mirar las referencias pero seguro que hemos perdido tiempo sobre el previsto. Son las seis de la tarde y lo único bueno es que nos quedan todavía 12 horas y que hemos cubierto el 60% del kilometraje y también del desnivel positivo.
Los primeros kilómetros hacia Restanca nos sirven para recuperar fuerzas. El Coll de la Crestada, 2.475 m, marca el comienzo del descenso al refugio, 400 metros más abajo. Una senda entre rocas, y que te obliga a concentrarte para buscar el mejor apoyo. Con todo, lo peor para la moral es que ese mismo camino lo tendremos que hacer de subida. Llegamos a Restanca pasadas las ocho de la tarde y ninguno queremos subir ese pedregal a oscuras, así que decidimos detenernos lo menos posible, ponernos algo de ropa de abrigo, reponer bidones y comer algo rápido. Nuestra sorpresa es que no hay avituallamiento, solamente unos vasos de isotónico diluido. Ante nuestro enfado nos dicen que es que hemos llegado muy tarde y que si tenemos alguna queja la hagamos llegar a la dirección del parque. Nos quedamos a cuadros, nuestro enfado es tan grande que salimos antes de lo previsto.
Comemos durante el ascenso y encendemos las luces rojas para localizarnos en la penumbra. Nos cruzamos con muchos corredores que terminan su recorrido en Restanca, ¿les darán algo de comer cuando lleguen o será demasiado tarde?. Ya de nuevo en el Coll de la Crestada -la subida la hemos hecho más rápida de lo esperado-, es de noche y terminamos de abrigarnos incluso con guantes y buffs. Las fuerzas están muy justas y el tiempo para conseguir el objetivo también. Lo peor que nos puede pasar es que nos perdamos, así que nos conjuramos todos para ir con mil ojos y mirando los GPS de reojo. Juanjo y Jesús cogen la cabeza, no hay que desviarse ni un metro, Jaume comprobando a la menor duda y detrás Eduardo, Jorge y yo. Pasado el Port de Caldes nadie quiere saber lo que queda para terminar, el grupo se estira y a veces nos perdemos de vista. Es el peor momento, pero conseguimos llegar a las once y media a Colomers, donde nos reagrupamos.
Saboredo, Amitges y Mallafré. Tres refugios. Seguimos con la misma dinámica, Juanjo a la cabeza y Jesús de refuerzo no pierden ni una seña. Esto nos ahorra muchos esfuerzos pero ellos van agotados. El Coll de Sendrosa es un matapersonas, una “tachuela” de 400 m de desnivel en un kilómetro. Los corredores que vienen de frente nos sirven de orientación. Entre ellos nos volvemos a cruzar con los de Alcoy aunque ya no hay tiempo para grandes saludos, ambos grupos vamos contrareloj. Nos deseamos suerte .
En Saboredo, un refugio pequeño con un par de mesas, nos tratan estupendamente. Hay caldo caliente, pasta e infusiones, pero sobre todo nos dan ánimos, en Ventosa nos dijeron que íbamos mal de tiempo 🙁 . Uno de los guardas sale con nosotros y nos orienta en la dirección adecuada. ¡Gracias!, es muy fácil desorientarse en la salida de un refugio de noche e irse por donde has venido.
Hemos hecho cálculos. Si cubrimos las dos etapas en los tiempos previstos, llegamos. No echamos las campanas al vuelo, queda otro obstáculo antes de llegar a Amitges, el Port de Ratera. Después de más 60 km las piernas no quieren coordinarse con la cabeza o al revés, con lo que los resbalones y las caídas se suceden. A trancas y barrancas llegamos a Amitges, 4:41 am. Nos quedan 5 km de descenso por la pista que utilizan los taxis. Los que llevamos GPS vamos cantando lo que queda como una cuenta atrás. A ratos vamos trotando y nos reagrupamos caminando. Cuando falta kilómetro y medio, Edu se saca un conejo de la chistera y como había estado con Reme el día anterior por esa zona, se pone en cabeza, pilla un atajo campo a través y de repente el GPS marca 800 m para su destino. ¡Bravo por Edu!.
Entramos en Mallafré y sacamos los forfaits. Hora: 5:39 am
¡Somos CdF Skyrunners!
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También puedes leer la crónica de Jorge en su blog
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Mallafré | J.Mª Blanc |
Colomina | Estany Llong |
Ventosa | Restanca | Colomers | Saboredo | Amitges | Mallafré | |
Hora de paso | 06:15 | 08:25 | 10:41 | 13:38 | 18:10 | 20:16 | 23:35 | 02:16 | 04:41 | 05:39 |
Tiempo en cada refugio | – | 6’02” | 3’33” | 17’54” | 10’27” | 12’57” | 13’34” | 8’36” | 6’24” | – |
Duración de cada etapa | – | 2h10′ | 2h16′ | 2h57′ | 4h32′ | 2h06′ | 3h19′ | 2h41′ | 2h25′ | 0h58′ |
Tiempo acumulado | – | 2h10′ | 4h26′ | 7h23′ | 11h55′ | 14h01′ | 17h20′ | 20h01′ | 22h26′ | 23h24′ |
El tiempo que paramos en cada refugio lo hemos sacado del registro del GPS a la entrada y salida del mismo
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Enlaces de interés
Nuestro CdF de 2009 |
Algunas referencias que nos fueron de ayuda |
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Este es el recorrido y el perfil registrado con un Garmin Oregon 400t. Las marcas de color azul aparecen cada diez kilómetros. Los waypoints aparecen en rojo, hacer click sobre ellos para ver más información.
[Puedes descargar este track en formato GPX y KMZ. Contiene un fichero para realizar un vuelo virtual sobre el recorrido]