La Madrid-Segovia (M-S) es ya toda una realidad, un ULTRA POPULAR -con mayúsculas- que se afianza en el calendario, y que estoy seguro irá consiguiendo más apoyo (patrocinador) para futuras ediciones. El reconocimiento de los corredores es ya unánime.
Esta no es una crónica -no me salen-, y veréis que muy pocas de las fotos que acompañan al texto son en color, porque creo que el blanco y negro hace mayor justicia a la belleza y dureza del paisaje y la carrera.
Lo mejor que tiene la M-S, sin ninguna duda, es el trabajo del equipo organizador, desde las cabezas visibles (Anna, Fernando, Paco Rico), hasta el último voluntario. Los medios son escasos -la falta de patrocinio se nota-, pero donde faltaron medios se suplió con ingenio, ilusión y, sobre todo, muchísimo cariño.
Será muy difícil superar el nivel del voluntariado. Las sonrisas y palabras de ánimo en avituallamientos fueron constantes, y los Garabitas han puesto el listón muy alto para futuras ediciones. Paco y compañía, solo me queda pediros que repitáis muchos años!!!
En lo particular, mi objetivo era terminar la prueba y, a ser posible, en las mejores condiciones, ya que el año pasado tuve que retirarme en Cercedilla (km. 64) por las (grandes) ampollas que me crecieron. El objetivo principal lo he conseguido, aunque tuviera que sufrir de nuevo ampollas. Nada de lo que probé este último año (zapatillas, calcetines, cremas, etc.) parece haber funcionado, pero gracias a que tenía un Plan B -llevaba un botiquín surtido- y a mi actitud mental -creo que nunca perdí la sonrisa-, las circunstancias que el año pasado me hicieron abandonar, fueron obstáculos que pude salvar.
Sigo con los agradecimientos para felicitar a los servicios médicos de Protección Civil de El Boalo-Mataelpino, y a las chicas (y chico) de la Cruz Roja en Cercedilla. Así da gusto correr con ampollas!!!
Mi enhorabuena para los que supistéis hacer realidad este sueño, aunando las ilusiones del deportista y el peregrino. Gracias, Anna. Quisiste ser tú quien me pusiera la medalla en Segovia. Solo por eso, merece la pena volver.
Y por último, pero no por ello menos importante, gracias a mi familia, que me acompañó unos momentos en Cercedilla, pero que comparte mi ilusión durante todo el año.
Nombre | Tiempo | Puesto General |
Eduardo “Commedia” | 19:59:58 | 236 |
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