Después de echar una cabezadita en el sofá, nada mejor que despertarse e ir al pueblo de al lado a correr una media maratón un Sábado por la tarde.  Edu y Juanmi se ponían en camino desde Petrer y Juan Carlos y Jon desde San Juan. Allí aparcando los coches nos encontramos los 4, unos con ganas de correr y otros con ganas de cachondeo (esto diferencia a los que hacen podio de los que no).

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Colgamos la pancarta, recogimos los dorsales, una rociada de vaselina en los puntos claves y a la salida a empezar la carrera.

El día estaba perfecto, buena temperatura aunque un poco airoso. La participación unos 450 corredores entre los 13 kms y la media maratón. El partido de las 20.00 hrs hizo mella en las inscripciones.

Edu y yo no quisimos disputar la carrera y dejamos salir delante a otros corredores de élite para dedicarnos nosotros a hacer una carrera solo de exhibición y no competitiva. El ambiente estuvo algo escaso, la gente ya andaba mas preocupada de coger sitio para el partido que de ver la carrera, no obstante tuvimos público sobre todo en la zona de la gran avenida. Vimos pasar a Juan Carlos, raudo, veloz, con estilo digno de un campeón, le seguía Jon “la liebre de Barakaldo”.

Depues de 1 hr 45 mins exactos entramos a meta acompañados de Mireia y Eduardito. Corrimos a 5 min/km con un dominio total del ritmo, ¡así es la carrera de exhibición!

Podio para Juan Carlos que quedo 3º en su categoría pero que, en un acto de humildad o de pasión futbolera, se fue sin recoger su premio.

Para los medio maratonianos nos quedó un buen sabor de boca y a mi una irritación en la entrepierna brutal provocada por el magnifico pantalón de atletismo que Tuga nos hizo, una autentica lija que me dejó la piel en carne viva. No se para que utilizaré el pantalón en un futuro pero si alguien lo quiere se lo cambio por un bote de bálsamo del bebé y unas tiritas… Para Edu un día entero sin móvil, hasta que volvió a recogerlo al descampado donde aparcamos y lo dejo tirado entre las matas… C’est la vie!

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