En un entrenamiento Verena me comentó que la habían invitado a correr la Maratón de Javalambre. Era una prueba a la que le tenía muchas ganas porque está muy cerca del pueblo de mi padre, Corcolilla. Lo comenté con Carlos y aprovechando que teníamos casa, nos fuimos a pasar el fin de semana a Corcolilla con nuestras mujeres e hijos. Verena el día antes se encontraba mal, así que decidió no venir ¡te echamos en falta!
La carrera sale de un pueblecito llamado la Puebla de San Miguel y allí nos desplazamos para encontrarnos con no llega a 200 participantes. En las Tucas, Carlos se fue para adelante en el km 4, así que me propuse aguantar su ritmo hasta que me fuera posible.
Durante el inicio de la prueba no paramos de adelantar gente, más bien, Carlos iba adelantando y yo pegado a él como una lapa. Sin darnos cuenta y todavía con fuerzas coronamos el Pico Gavilán 1.712 m, km 9 aprox. Desde ahí hasta el km 15 tenemos una preciosa bajada con zona de bosque en la que aún me es más difícil seguir el ritmo de mi compañero, pero al final me espera un poco y seguimos juntos.
Aquí empieza una de las zonas preciosas de la carrera, cruzamos el río 4 o 5 veces para acto seguido empezar a remontarlo y llegar a una cascada que nos dejó sin aliento, por lo bonita y por las escaleras que había que subir. En el avituallamiento del km 18 le digo a Carlos que tire para adelante que me lo iba a tomar con un poco más de calma.
Justo después subimos un cortafuegos al que habían denominado el “cabroncillo” o algo por el estilo, hizo honor a su nombre, me dejó tocado, pero por fin coronamos el pico Calderón 1.838 m. De ahí a la cima más alta de la carrera, Javalambre 2.018 m, ascendemos sin mucha pendiente y con alguna bajada por un paisaje precioso, que es precisamente la imagen promocional de la carrera.
A menos de un kilómetro de Javalambre me encuentro con Carlos que ya ha coronado y ha empezado la “bajada”, cojo ánimos ya que pensaba que me sacaba más tiempo y doy el último arreón hasta el pico.
Empieza la bajada, por llamarlo de alguna forma, ya que durante 5 km, subimos y bajamos bordeando un barranco bastante peligroso y que me tomo con mucha calma. Del km 35 al 45 si que disfrutamos de una bajada no muy técnica en la que, si no fuera por mi bloqueo en este terreno o por el cansancio acumulado, se puede ir muy rápido.
A 200 m de meta me cruzo con Carlos que salía de la ducha limpito y perfumado… Él parece que si tenía fuerzas para hacer la bajada en condiciones.
Una prueba de 46 km, 2.600m D+ muy bonita, no demasiado técnica en la que se puede correr todo lo que las fuerzas te den.
Volveremos.
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Enlaces sobre esta prueba
Nombre | Categoría | Tiempo | Puesto General | Puesto Categoría |
Carlos R. | VET-M | 6:37:29 | 42 | 16 |
David G. | ABS-M | 7:14:47 | 66 | 37 |
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[Puedes descargar este track en formato GPX y KMZ]
Este es el recorrido y el perfil registrado con un Garmin Edge 705. Las marcas aparecen cada 5 kilómetros.
El perfil está dibujado con el programa Perfils. Haz clic sobre la imagen para ampliarlo.
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Me quedé con las ganas de ir. Tengo la espinita clavada y el próximo año ya la tengo marcada como de máxima prioridad. Por lo que cuentas, me recuerda a MAMOVA en lo poco técnica y corredora. Tendré que trabajar más la velocidad. Gracias por contárnoslo tan bien.
Grandes, David y Carlos!!
La anoto para futuras ediciones…
Ya tengo ganas de que coincidamos de nuevo.
🙂