90K CAMINO DE LA CRUZ DE MURCIA A CARAVACA

Después del descanso viene la calma. Esta ya no me la cuentan, 90 km y prueba terminada. Me siento muy feliz, ha sido dura o por lo menos así lo sentí yo… Muchas horas midiendo mi capacidad de fuerza mental, pues sola los kilómetros se hacen menos fáciles 😜. Mucho calor, máximas de 35º-36º, sin apenas sombra y un pie dándome guerra desde el km 50… pero pudieron más mis ganas que el dolor. Graciasss a todo este grupo humano con los que he compartido cervezas, risas y esta aventura. Me lo he pasado en grande… #123.604pasos🚶🏻‍♀️❤️ #pensandoenlasiguiente #madridsegovia o #101deRonda💪

Abrazos,
Aránzazu Garcia Espinosa. La Bellea

Enlace: 90K – 90k Camino de la Vera Cruz (90kcaminodelacruz.es)
Clasificacion:
90K
 – 06:00 h. | 91600 m.

P.GEN. DORSAL NOMBRE Y APELLIDOS CLUB P.SEX. P.CAT. CATEGORÍA META T.CHIP RITMO DIPLOMA

312

471

ARANZAZU GARCÍA ESPINOSA A TO TRAPO

38-M

3

M55F

17:00:30

17:00:30

11:08

BOTAMARGES 2023 LA DÉCIMA. 7 Octubre 2023

Fue en el año 2013 cuando hice mi primera Botamarges. Aquí empezó mi “pasión” por las carreras largas de montaña. Desde entonces muchas han sido las ultras en las que he participado, muchos los kilómetros compartidos con la gente que hemos ido conociendo, muchos paisajes que quedaran grabados en la retina para siempre y muchas las emociones vividas. Y, como aquí empezó todo, decidimos que mientras el cuerpo nos lo permita, nos presentaríamos en Forna para estar en la línea de salida de la Botamarges. Este año, era mi X Botamarges consecutiva (si no os salen las cuentas recordar que tuvimos una pandemia que nos dejó sin carrera durante un año). Bueno, vayamos al grano:

Ya hace algunos años que los chic@s del Club de Montaña Botamarges nos dan la posibilidad de, además de la Botamarges, 64 KM y 3200 d+, hacer la Trencaclosques, 21 KM y 1100 d+. Cuchi y Pez nos representarían en la Trencaclosques, mientras que “los Mendez”, “los Gosa” y “los Jesuses” participábamos en la Botamarges.

Chuchi subió al Podio un par de veces. Tercera en la General y Segunda de su categoría. “Casi Ná”. Está fuerte y nos alegramos muchísimo por todos los éxitos que está consiguiendo.

Pez consiguió terminar la carrera en un tiempo mucho más que digno, pese a los problemas que le da su rodilla. Es incombustible.

En cuanto a los de la Botamarges, las circunstancias marcaron la carrera.

Cuando terminados la Maratón de Confrides (mes de mayo) decidí que este año iba a preparar bien la Botamarges a ver si conseguía llegar de día. Pero no tuve en cuenta la primera circunstancia. La Comparsa Templarios éramos capitanía y había que prepararla, con lo que, todas las tardes había que estar en el tajo preparando el boato. Tuve que ponerme duro y decirles que los miércoles eran míos porque tenía que ir a Perdices y Conejos a entrenar. Así que, nos presentamos en la línea de salida de la Botamarges entrenando solo los miércoles y los sábados con subidas al Cabeçó. (Jesus “el jefe”, creo que el único entreno de montaña que hizo fue en el Cabeçó el domingo anterior)

La segunda circunstancia está íntimamente ligada a la primera. Del 7 al 13 septiembre, Fiestas de Moros y Cristianos de Mutxamel. A buen entendedor ……..

Enumerada la pre-carrera, pasemos a las circunstancias que se dieron en esta.
A las 6:00, como siempre, era la hora de salida. A esa hora todos los participantes ya sabíamos a que nos enfrentaríamos durante todo el día. Tercera circunstancia CALOR y HUMEDAD.
Este año no somos muchos corredores en la Ultra. Solo 179. Así que nada más salir ya no llevamos a casi nadie detrás. Jesus Jr (Santana) ha salido delante. El resto nos mantenemos más o menos juntos. Empezamos la subida y los Méndez y Fernando se van un poco. Yo quedo detrás con Jesús y Esteban (un chico del club Botamarges que es su cuarta participación y va como nosotros a intentar terminar). No llevamos ni media hora de carrera cuando Jesus ya me dice que voy empapado y así pasé el resto del día.

Estamos bajando hacia el primer avituallamiento cuando Esteban nos suelta la bomba. Este año volvemos a subir al Castillo de Benisili y tenemos que hacer todo el cresteo de la Foradá. El año pasado eliminaron el cresteo y la subida debido al incendio que afectó la Vall de Gallinera. Esto a su vez implica hacer cima en el pico de La Safor y afrontar su larga y pedregosa bajada, que al estar dentro del primer tramo de carrera parece que no sea muy dura, pero te desgasta. El tramo final de la carrera la han dejado como el año pasado. Así que sin esperarlo nos enfrentamos a la cuarta circunstancia. Un recorrido que, ojo solo según mi poco conocimiento, es bastante más duro que en otras ediciones.
La carrera va transcurriendo y todo parece que va bien. Vamos con los ritmos adecuados para poder llegar a meta en el tiempo máximo que da la organización (15:00 horas).

Nos dirigimos al Avituallamiento de Benisili en el Kilómetro 32 de carrera. Allí están Conchi, Eva y los hijos de Jesus Jr (Jesus Jr Jr y Carlos). Este es otro de los encantos que tiene para mí la Botamarges. El seguimiento que puede hacer tu familia. Saber que los vas a ver en varios avituallamientos te da ánimos. Ellas también sufren lo suyo y aguantan como unas campeonas todas las horas que estamos nosotros “penando” por el monte. Aquí llegan las primeras noticias preocupantes. Jesus Jr va muy tocado. Ha vomitado y nos comentan que lleva muy mala cara y que las piernas no le van. Pero como es un jabato y no se da por vencido fácilmente ha decido salir y afrontar el castillo y el cresteo hasta el próximo avituallamiento a ver que tal. Nosotros avituallamos, nos refrescamos (gracias a las bebidas frías de nuestras “suporters”), tomamos aire y para arriba.

Calculo que saldríamos del avituallamiento cerca de la 13:00 h. El calor es agobiante. Afrontamos la subida animados. Por delante Fernando, Tomas y Jose Antonio. Jesús y yo no muy lejos de ellos. Todo parece ir bien, pero pasado el castillo y cerca del tramo final de subida (el amigo Jaime seguro que sabe donde digo) Tomas se siente indispuesto. Vomita. Tiene que sentarse. No tiene fuerzas. Le dejamos coger fuerzas, come algo. Le digo a mi hermano Fernando y a Jose Antonio que tiren para adelante que me quedo yo con Tomas. Jose (se me hace raro llamarlo así) dice que se queda con su hermano. Así que nos encontramos con la quinta circunstancia. En las carreras de montaña hay algo que esta por encima de resultados, por encima de metas, por encima de todo y que no sé porque me da que últimamente tenemos descuidado. El compañerismo. El cuidar del corredor que está tocado, aunque no lo conozcas de nada y aunque te diga que está bien. Ahí arriba estamos solos, no hay gente, ni coches, ni policías, nada. En nuestro caso, literalmente, estábamos solos. Éramos los últimos. Por detrás solo las escobas que a saber dónde o con quien estaban l@s pobres, porque, siendo los últimos no los vimos en ningún momento.
Así poco a poco vamos avanzando. De vez en cuando Tomas tiene que sentarse. El calor es sofocante. Llegamos al punto de agua que la organización instala a mitad del cresteo y que no cuenta como avituallamiento. Es un salvavidas para aquellos que para ahorrar peso y sin estudiar la carrera van con el agua justa. Como somos los últimos el chico y la chica responsables del control recogen para irse. Nos comentan que l@s escobas están subiendo en ese momento por el castillo lo que nos da la sexta circunstancia. Tomás se va con ellos. Su carrera ha acabado.

Nosotros seguimos. Queda bastante Foradà y el calor aprieta. Jose delante, yo detrás y por último Jesus, que va a su marcheta. Voy dejando que Méndez (ya solo queda uno), se vaya y yo voy mirando para atrás. No veo escobas ni en el principio del cresteo. Me preocupa perder a Jesús. Cualquier problema, una torcedura, una caída, un desfallecimiento (aunque él con el calor se crece) haría que se quedara solo, a pleno sol y sin saber cuándo podrían pasar l@s escobas. Sé que esto nos va a lastrar, porque el después seguro que puede correr y la ventaja que pudiéramos sacarle aquí, el nos lo hubiera recortado, como así sucedió al final.

Llegando al final de la Foradà Méndez se para. Le digo que tire, pero me dice que está algo mareado. Collons!!! que día!!. Come algo y se le pasa pronto.

Enfilamos la bajada hacia el avituallamiento de Benissiva Kilometro 42 de carrera. Han sido 10 kilómetros infernales. Me adelanto un poco a Jesús para estar un rato más con Conchi. Allí están. La mala noticia es que también esta Jesus Jr. Imposible recuperarse en el cresteo. Ha decidido que no va a sufrir más. Su carrera ha acabado. Ya van dos bajas.

Salimos del avituallamiento decididos a darlo todo. Por delante llevamos a Fernando con el que no hemos coincidido en el avituallamiento. Vamos “llaneando” un poco y en la primera subidita suave, “rampón” del 10. Grito, me quejo, me golpeo y aprieto los dientes. Sé que se pasará. Sigo. Ahora voy yo el último, pero se acaba el llaneo y para arriba. Subo bien. Me pongo delante y empiezo a tirar. Tengo que llevar mi ritmo para evitar rampas. Llego al avituallamiento del Kilómetro 47. Méndez llega cuando yo voy a salir. El próximo avituallamiento es en Villalonga. Aquí hay Corte y tenemos que estar antes de las 19:00 horas. Le ha costado subir. A Jesús también, pero sé que ellos correrán en la pista que nos lleva a la bajada. Y así es.

Primero me alcanza Méndez y a mitad de la bajada nos alcanza Jesús (yo lo tenía claro). Por cierto, ¿Cómo puede cambiar tanto una bajada de un año para otro?, es como si fuera totalmente diferente. La del año pasado fue dura. La de este año…… criminal!!!

Mi reloj ya me va pronosticando que no llegaremos en tiempo, ni al corte, ni a meta. Alguna vez me ha marcado que no llegaría a un corte, pero si a meta, lo que siempre me ha dado pie a forzar a tope para llegar al corte, pero esta vez me decía que ni una cosa ni otra.

En el avituallamiento está Fernando. Él ha llegado 10 minutos después del corte, y ha decido quedarse. Los voluntarios del avituallamiento le hubieran dejado seguir como han hecho con Esteban, el compañero con el que coincidimos al principio de carrera. Nosotros casi 20 minutos después del corte. Nos planteamos si seguir o no: Podemos hacer todos “grupeta” e intentar completar el recorrido, aunque fuera de control. Estamos en el Kilómetro 55. Nos quedan 10 y unos 500 de desnivel +. Calculamos que llegaríamos a meta, como muy pronto a las 22:00. Méndez quiere seguir. Lo entiendo. Es su primera Botamarges y quiere completar el recorrido, pero no es nada sensato. Se le explica. No tiene sentido. Así es esto. Unas veces se gana y otras……. TAMBIÉN!!!! Hemos completado 55 Km de una carrera muy dura. 13:30 horas de montaña, compañerismo, paisajes, disfrute y sufrimiento. ¡Que más se puede pedir!.
Nuestra carrera ha terminado. Seis bajas.

Así fue mi X Botamarges. Una Botamarges al estilo MTX

GOSA 9
BOTAMARGES 1

Esperemos que el año que viene las circunstancias sean otras. Sea como sea, espero poder estar en la linea de Salida de la X Botamarges de Jesús Jr

Aquí, hace 10 años, es donde encontré, en una pancarta, el lema con el que suelo acabar todas mis crónicas:

El Dolor es Pasajero
la Gloria es Eterna. (Aunque la Gloria no signifique siempre cruzar la línea de meta)

Old Runer Never Die

Salut i Muntanya
Gosa

Pd: Cuando oyes al “Espiker” decir tu nombre, dice las ediciones que llevas, cuenta de donde vienes y oyes los aplausos de los demás corredores……., tuve que tragar saliva dos veces. Solo eso ya valió pena.

Otra Pd. Lo último que supimos de Esteban ya cuando abandonábamos Forna cerca de las 21:30 es que podría haberse perdido. No sé si nos lo decían de coña o no. Espero que llegara bien a Forna y que no se le hiciera muy tarde.

Felicitar a los compañeros que corrieron la TRENCACLOSQUES, y de que manera ¡! Cuchi Ballenilla quedo la 3ª de la general femenina y 2ª de su categoría (es de otro planeta) y el amigo Jose Manuel Domenech “PEZ” que sigue con su buena racha. Enhorabuena ¡!

LOS MONTESINOS ENDURACE 16/09/23

Pues toca hacer crónica de mi paso por las 6h de los Montesinos (se ha hecho de rogar). Primera vez que participo en este tipo de carreras y me da que no será la última.
Los Montesinos me están descubriendo un tipo de carreras que no pensaba que existía y mucho menos que podría pensar que se me daría bien.
En cuanto a la carrera pues una recta de 700m en cada sentido con dos giros de 180° para hacer un recorrido de 1’4km por vuelta. Control de chip en cada vuelta para controlar el número total de kilómetros y avituallamiento también cada vuelta montado por la organización. Carrera que empieza a las 18:00 de la tarde hasta las 00:00 de la noche y gana el que más kilómetros haga.
La verdad que entre Manolo Rico y la concejalía de deportes de los Montesinos hacen muy buen equipo y organizan cosas pensando en los corredores y en sus familiares, todo es fácil con ellos… Eso demuestra que aún se puede organizar carreras a buen precio sin que lucrarse sea el primer objetivo.
Recogimos los dorsales y nos instalamos en la misma recta después del avituallamiento de la organización. Ahí uno se monta todo lo que necesite. Unas sillas para la familia, mesa para el avituallamiento personal y todo lo que creas que te puede hacer falta. Así que a las seis pistoletazo de salida de todas las distancias que había y a correr.
En cuanto a mi carrera particular fui a modo entreno preparando una carrera más larga para finales de octubre e íbamos a probar cosas… Carrera dividida en tres bloques de tiempo y a ver cómo iban pasando. Primer bloque de volumen a ritmo tranquilo de 2h30′ que pasó sin ningún problema. Segundo bloque de 1h30′ donde ahí tocó apretar bastante, tal vez más de la cuenta. Todo con vista a ese tercer bloque de 2h para ver cómo llegaba y a ver los ritmos a los que podíamos correr. Al final cuando podía correr iba al ritmo que tocaba, pero fui alternando con algún kilómetro andando, aún tengo que limar cosas con la alimentación que no acabo de solucionar.
Cómo había muchas distancias, prácticamente no nos quedamos los de las 6h solos hasta que llevábamos 5h. Entonces aunque después de tantas vueltas ya sabíamos quién era cada uno, estuve bastante entretenido y no se me hizo pesado darle vueltas. Así que llegué al final de las seis horas con un total de 66km que me dejan bastante contento y si de paso rascamos un podium al segundo de la categoría detrás de Francisco Mariano Martínez un mundialista del ultrafondo español y que está preparando el mundial de 24h en Taipei, que se cascó 81km en las 6h. Pues poder subir al cajón siempre hace ilusión y más con gente así!
Lo mejor poder seguir compartiendo esto con mis chicas que son mis más fervientes admiradoras y poder seguir entrenando con normalidad para lo que viene!

TRAIL ONIL 14K. 8 Octubre 2023.

Buenas tardes, muy contento de haber vivido mi primera experiencia en un Trail de 14,km con muy buenas sensaciones incluso con ese temor de no acabarlo, pero no soy de los que tira la toalla nunca y nada más especial que disfrutar de esas vistas desde la cima y el buen ambiente que se vive en la montaña. Muy buena organización, espero repetir en breve otra y por supuesto con mi buen amigo TIKI, que él siempre me ha empujado a unirme a este gran club con todos vosotros, gran equipo A To Trapo.

Javi Vegara

Clasificaciones : https://www.mychip.es/resultado/6-trails-onil-6/finished

 

63   01:58:06   MARTINEZ CORBALAN, FRANCISCO   20   VETERANO    A TO TRAPO

68   01:59:43   8:32    447   VEGARA EGEA, JAVIER   23   MASTER-M   A TO TRAPO

EL KILÓMETRO CERO: MADRID – TARIFA

Ya han pasado unos meses de esto y es ahora, a lo lejos, cuando empiezo a ser capaz de reconocer lo vivido.

Me cansé algo de la montaña (son muchos años en la ultra distancia) y mi hermano, guía vital deportivo, decidió aprovechar este bajón para generar en mí una necesidad imperiosa: entrar en el mundo Gravel.

Los inicios fueron complicados: más de 10 años sin tocar una bicicleta y las dificultades logísticas del tándem “vida en Madrid y entrenamiento sobre dos ruedas” no me lo han puesto fácil.

Gracias a mi terquedad, horas de adaptación y la gran idea de Boti ahí estábamos, embarcados en esta nueva aventura que consiste en recorrer los 750km y más de 7.500 D+ que separan el KM 0, en Madrid, del faro de Tarifa.

El formato de la carrera es muy nuestro: no competitivo, 100 horas para llegar, autosuficiencia absoluta y un ambiente inmejorable, de los más auténticos que he podido vivir en este tipo de eventos.

Integrantes: Carlos, súper placer volver a vivir experiencias deportivas juntos; Steve, un tipo muy muy fuerte; papá Boti, líder, gregario, ayudante, guía, apoyo y un ejemplo de vitalidad absoluta; e Ignacio, como siempre, apéndice y en este caso, sherpa y rueda de mis ruedas.

Cada uno plantea la ruta como quiere y/o puede: lo único fijo es que debemos salir el miércoles entre las 6:00 y las 7:00 de la mañana y llegar, como tarde, el sábado para cenarnos un atún regado de zumo de uva gaditano.

Etapa 1: muerte.

Salimos de la Puerta del Sol (KM0) con mucha emoción, atravesamos Aranjuez, pasamos Toledo y con 100km ya voy (muy) jodido. Las piernas no van, todos están más fuertes que yo, siento el peso de pasar de cabeza de ratón a cola de león y me queda… un huevo. Son 280km de etapa (aprox) y nunca he superado los 200km, ¿qué haces aquí?

A todo esto se le suma un problema técnico que hace que la cadena de la bicicleta se salga, sin exagerar, cerca de 25 veces al día.

Necesito calma, subo asfixiado el único mini puerto del día y un pinchazo viene en mi auxilio para darme ese parón que necesito. Hincho ruedas, respiro hondo, me sumo en la consciencia del sufrimiento y vuelta a la carretera, con Ignacio, como siempre, a mi lado. El dolor en silencio se mantiene pero mi lucha por acabar con los agobios está funcionando.

Ciudad Real (km 230), sigo mal aunque ya encuentro esa paz que me permite disfrutar del sufrimiento. Nos unimos con Carlos y hacemos los últimos 50km con un precioso atardecer y The Queen sonando de fondo en nuestro altavoz portátil (que se llama pistacho). Almodovar del Campo, 280km y 15 horas de bici, impresionante que haya podido llegar hasta aquí.

Cena en compañía de todos, risas, piernas en alto, y al sobre.

Etapa 2: voy mejorando.

Se plantea llegar a Córdoba (en el fondo sabemos que queremos cruzar esa barrera y acercarnos hasta Écija, a ver qué se cuece). Me levanto jodido, pero infinitamente más contento que el día anterior.

Ignacio y yo nos adelantamos para saborear el fresquito de la mañana y en muy poco nos alcanzan Boti, Carlos y Steve; ¡Que gente más fuerte! Ya no me importa, me encuentro cómodo, los dolores están asentados, las salidas de cadena ya no importan y la cabeza funciona, ¡Vuelta a la vida!

Tras Villanueva de Córdoba subimos el puerto que nos acerca hasta Obejo, ¡Guapísimo! Un poco más, y aprovechando la rueda de papá Boti e Ignacio, estamos en Córdoba. Evidentemente, Ignacio y yo decimos tirar pa’lante para meter 50 km más y acabar en Écija.

Sigo jodido, pero ahora sí, muy feliz. Entre conversaciones profundas cruzamos campos inmensos de girasoles (me quedo con ese sonido de la grava, el atardecer y el girasol escondiéndose) y a eso de las 10 de la noche, entramos en una preciosa ciudad de Écija. 15 horas de bici, hostel, cerve sin alcohol, jamoncito, piernas en alto, y al sobre.

Etapa 3: ya soy el que quería ser.

Amanece con lluvia y salimos del tirón; por detrás vienen Boti, Carlos y Steve, cada uno con sus km, cada cual con su propia carrera. Me vuelvo a beneficiar de mi condición de hermano pequeño y cojo la rueda de Ignacio hasta Osuna (inicio complicado). Aquí empieza el desnivel y lo más bonito del viaje.

Subidón hasta Setenil de las Bodegas que nos devuelve a mis inicios en el ultra fondo con los 101 km de Ronda que corrimos hace ya unos 13 años (qué recuerdos con Juanma, Antoñito, Jesús y el resto de los A To Trapo!). Paradita, porra antequerana y última subida larga hasta Ronda, ya estamos, ¡yija!

Seguimos un poquito más y disfrutamos de una noche romántica en un hotel de carretera en el pueblo de Atajate. Sorprendente eso de ir a mucho mejor.

Etapa 4: Finishers!

Madrugón para disfrutar del amanecer saboreando ya los olores de Cádiz y la Sierra de Grazalema a lo lejos.

Desayuno salao en el impactante Castillo de Castellar de la Frontera, rozamos Gibraltar y subida impresionante por el Parque de los Alcornocales (muy recomendable). Sensaciones indescriptibles ante este último puerto de la aventura que cruzamos con mucha calma, saboreando lo vivido y con el Estrecho y Gibraltar a nuestros pies.

Noto que me caen unas lagrimillas antes de bajar a Tarifa (aunque esperaba más); lo mejor, que no quiero que esto acabe. Cruzamos Tarifa y la emoción nos lleva ante una línea de meta natural, simple y muy soñada después de más de 83 horas de vida en plena consciencia.

Bañito en el atlántico con Pistacho sonando (¡gustazo acabar en pelotas este viaje!) y en pocas horas ya están todas las naves en puerto.

De la experiencia me quedo con todo. A nivel personal, reconozco que me ha faltado entrenamiento, aunque el cuerpo ha ido de menos a (mucho) más y he logrado aprender de mí (a veces es jodido, pero los momentos oscuros pueden ayudar a conseguir la máxima claridad).

Gracias papá Boti por cuidar de todo el equipo y llevarnos hasta aquí; gracias Carlos por los momentos compartidos; gracias Steve por enseñar tu fortaleza; gracias Ignacio por entenderme, hablar cuando se necesita, callar cuando el cuerpo lo pide y apoyar en cada km.

Gracias Helena, por supuesto.

Gracias vida por permitirme hacer estas cosas, que se que no son normales, aunque también soy consciente de que sin ellas no sería quien soy.

Nos vemos en las siguientes, sobre ruedas o en zapatillas, lo único seguro es que será en el camino. ¡Seguimos!